jueves, 21 de agosto de 2008

Se oye una canción...



Once upon a time, in a faraway land,
A young Prince lived in a shining castle.
Although he had everything his heart desired,
The Prince was spoiled, selfish, and unkind.


But then, one winter's night,
An old beggar woman came to the castle
And offered him a single Rose
In return for shelter from the bitter cold.

Repulsed by her haggard appearance,
The Prince sneered at the gift,
And turned the old woman away.


But she warned him not to be deceived by appearances,
For Beauty is found within.


And when he dismissed her again,
The old woman's ugliness melted away
To reveal a beautiful Enchantress.


The Prince tried to apologize, but it was too late,
For she had seen that there was no love in his heart.
And as punishment,
She transformed him into a hideous beast,
And placed a powerful spell on the castle,
And all who lived there.


Ashamed of his monstrous form,
The beast concealed himself inside his castle,
With a magic mirror as his only window to the outside world.


The Rose she had offered,
Was truly an enchanted rose,
Which would bloom for many years.
If he could learn to love another,
And earn her love in return
By the time the last petal fell,
Then the spell would be broken.
If not, he would be doomed to remain a beast
For all time.


As the years passed,
He fell into despair, and lost all hope,
For who could ever learn to love...a Beast?

Ayer por fin vi por segunda vez "La bella y la Bestia" en teatro en Madrid; la primera fue hace ya unos cuantos años, cuando la trajeron por primera vez a España, y por algún motivo, aunque me gustó mucho, no me impresionó tanto como otros musicales que he visto. Pero la experiencia de anoche fue totalmente distinta: salí encantada! Si ya la película es una preciosidad (ya lo he contado en el blog unas cuantas veces, pero bueno, nunca esta de más recordar que estuvo nominada al Oscar a la mejor película), el musical ya es increíble. Es la misma historia de siempre (vamos, que podía haberme puesto a cantar y a interpretar a todos los personajes de la obra como cuando era pequeña sin ningún problema jejeje), pero con bastantes canciones nuevas preciosas y escenas más largas y más divertidas, como en casi todas las que salen los personajes del castillo. Desde el principio, sentí esa emoción que me da siempre cuando empieza un musical en teatro, y que pocas cosas más me hacen sentirla, y ya me pasé toda la obra con los pelos de punta. Los actores, estupendos todos; el montaje, increíble en todos los sentidos, los decorados, las luces, el vestuario... y las nuevas canciones, geniales, sobre todo "If I can't love her (Si no puedo amarla)", que ya es mítica para los que conocemos la obra y que estoy segura de que en unos años se convertirá en todo un clásico dentro de las canciones de los musicales. También son muy bonitas "A change in me (Un cambio en mi)", "Human again (Ser humano otra vez)" y "Home (¿Es hogar?)", junto con las famosas de toda la vida de "Qué festín" (menudo numerazo) o "La bella y la Bestia". Al final, todo el mundo acabó emocionado y aplaudiendo como locos, porque, como ya dije en su día con "Jesucristo Superstar", merece la pena pagar la entrada, por cara que sea, porque lo valen, y cada vez que veo estos musicales son para mi uno de los mejores momentos de mi vida. ¿Repetimos en Septiembre?:P

1 comentario:

Albert. dijo...

La verdad que fue una pasada y me alegró muchísimo verla por fin, y verla a tu lado. Fue un montaje precioso y muy bien trabajado, con números, decorados, canciones nuevas y bailes que te impresionan. Que pena que acabe el 7 de septiembre porque me la vería otra vez!Siendo de mis pelis favoritas de Disney que me emocionó desde que empezaba con esa música y cómo narran la historia como la has escrito aquí. Una preciosa historia de amor que me hizo pasar 2 horas y media en el mundo de Bella y Bestia.